MARTÍN DE CASTELLANOS
(ca. 1545-1614)
Cirujano de Felipe II, se le consideró
gran oficial debido a su probada maestría
y habilidad operatorias, especialmente
con la talla a la italiana; su arte le permitía
conocer la existencia de litiasis mediante
la tienta y, en las mujeres, conservando
la virginidad, curar quebrados sin dejarlos
impotentes, extraer cálculos, particularmente
de la vejiga, y curar llagas o
carnosidades. En 1612 Felipe III crea para
él una cátedra de Urología, con lo que
fue el primer catedrático de la especialidad
en la historia de la Medicina. Fue
reconocido por los médicos de Cámara
de la Corte como «el hombre más eminente
y de mayor opinión, ciencia y experiencia
que saben y tienen noticia que
haya habido».
Escribió un libro titulado Pasiones de
orina, fruto de su dedicación a la Urología
y de su especialización, antes de febrero
de 1608 ya que en esta fecha fue remitido
para su aprobación por la censura del
Consejo del Reino, aunque no llegó a
publicarse y el manuscrito se ha perdido.
Natural de Maudes, lugar cercano a
Sahagún, en la provincia de León y próximo
a Valladolid, donde transcurrió su
infancia, poco se conoce de su juventud,
a los 25 años inició su adiestramiento
en Valladolid con el licenciado Juan Izquierdo
durante unos tres o cuatro años
ya que ése era el periodo de tiempo
exigido para presentarse al examen del
Protomedicato. En 1574 residía en Madrid,
donde vivió cuarenta años, cerca
del Hospital de Antón Martín, en el que
atendía a sus pacientes de enfermedades
venéreas muy probablemente por el conocimiento
que del uso de las candelillas
tenía. En 1581 ostentaba ya el título de
Licenciado y en 1588 obtuvo el nombramiento
de cirujano de Felipe II. Cuatro
años más tarde solicitó a las Cortes que
le otorgasen el privilegio de divulgar su
arte y sus técnicas, lo que fue discutido
y concedido en 1608. El 5 de febrero de
1612 Felipe III firma la cédula de creación,
para el licenciado Martín de Castellanos,
de una cátedra de Urología con la obligación
de leer, practicar y enseñar todo
lo que sabía, para que después de su
muerte no quedase en el olvido todos
los conocimientos que por el estudio y
por su experiencia tenía. Falleció en 1614
y fue enterrado en el monasterio de San
Martín en Madrid.
Bibliografía: MAGANTO PAVÓN, E. (1993): «Semblanza del licenciado Martín de Castellanos de
Maudes», Arch. Esp. Uro., 46 (2): 89-94.
MAGANTO PAVÓN, E. (1994): «Noticias del tratado “Pasiones de orina” obra urológica
inédita y perdida del licenciado Martín de Castellanos», Arch. Esp. Uro., 47 (5): 437-444.
MAGANTO PAVÓN, E. (1994): «Vida y hechos del licenciado Martín de Castellanos (1545-
1614)», Real Academia del distrito de Universitario de Asturias y León, 115 págs., Oviedo.
PÉREZ ALBACETE, M. (2000): «La Urología en el Renacimiento», en «Historia Biográfica
y Bibliográfica de la Urología Española», pág. 106, Edicomplet, Madrid.
RIERA PALMERO, J. (1990): «Cirujanos, Urólogos, y Algebristas del Renacimiento y
Barroco», Acta médica Vallisoletana, XXIX, Valladolid.
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