Introducción: Miguel de Cervantes (1547-1616), contemporáneo de y alcalaíno como el proto-urólogo doctor Francisco Díaz (1527-1590), reseñó en su inmarcesible novela algunos, pocos, pero no menos curiosos párrafos relativos a cuestiones génito-urinarias.

Material y método: Análisis del texto y notas de Cervantes, Miguel de. Don Quijote de la Mancha. Edición del Instituto Cervantes (Dir. y coord. Francisco Rico). Madrid: Real Academia Española, 2015, 2 tomos, (I) 1644 pp., y (II) 1688 pp. Biblioteca Clásica de la R.A.E. (Vol. 47).

Resultado: 1.- El cuarto de los doce galeotes (1ª parte, cap. XXII, p. 263) confiesa a Don Quijote que sufre “un mal de orina que no me deja reposar un rato”. 2.- Don Quijote, en casa de don Diego de Miranda, “[…] ciñóse su buena espada, que pendía de un tahalí de lobos marinos, que es opinión que muchos años fue enfermo de los riñones” (2ª p., cap. XVIII, p. 842). 3.- El personaje humanista, innominado  erudito escritor que guía a Don Quijote  a la cueva de Montesinos, le refiere que “en otro libro que tengo [Suplemento a Virgilio Polidoro] declaro quien fue […] el primero que tomó las unciones para curarse del morbo gálico” (2ª p., cap. XXII, p. 887) y 4.- El médico galenista Pedro Recio de Agüero, asalariado en Barataria, prohíbe a Sancho los platos calientes y especiados por despertar la sed porque “el que mucho bebe mata y consume el húmedo radical, donde consiste la vida” (2ª p., cap. XLVII, p. 1997).

Conclusiones: El mal de orina como enfermedad terminal, sin esperanza de tratamiento; Don Quijote, personaje con antecedentes de cólicos renales que previene supersticiosamente, el tratamiento tópico de la sífilis y la profilaxis galénica de la fertilidad masculina son las referencias “uro-cervantinas” que se comentan en el póster.

Palabras Clave: Don Quijote. Cervantes. Mal de Orina. Mal de Riñones. Sífilis. Húmedo Radical.