INTRODUCCIÓN Y OBJETIVOS

Practicada como rito de marcación, símbolo de  identidad social, paso a la adultez, motivos religiosos, higiénicos y sexuales,  la circuncisión ha sido descrita en muchas culturas no relacionadas entre sí desde hace más de 5.000 años.

El objetivo es describir a lo largo del tiempo la circuncisión como un acto social que permite la integración del individuo en su cultura.

MATERIAL Y MÉTODOS

Búsqueda bibliográfica en Medline, textos antropológicos y religiosos.

RESULTADOS

En el Paleolítico alto (38.000-11.000 a. C.), si bien no hay representaciones etnográficas claras,  existen falos en erección con el glande al descubierto esculpidos  en cavernas de Europa  mediterránea, central y oeste de Rusia .

La primera evidencia etnográfica del acto de la circuncisión se encuentra tallado en roca en la necrópolis de Ankhmahor ubicada en Saqqara (Egipto), que data del 2400 a. C.

Ha sido descrita como una práctica desde el 3000 a. C. en las culturas preabrahámica, sumeria y semita, tal y como se cita en la Torá en la cual Abraham fue mandado por Dios a circuncidarse a sí mismo y a todos los hombres de su casa y dominio. Para estas culturas constituía un acto de alianza entre Abraham y Dios, y de Dios con los judíos, no como tradición, sino  como parte central de su identidad y requisito imprescindible para la conversión al judaísmo.

La circuncisión ritual es practicada en la cultura islámica al nacer, tras poder recitar el Corán o paso a la adultez. A pesar de no ser mencionado explícitamente en el Corán, se consideraba inherente las ordenanzas del profeta Mahoma: “….circuncidarse, depilarse el vello púbico, cortarse las uñas, depilarse el vello de las axilas y no dejar crecer el pelo sobre los labios”.

En los pueblos del  África subsahariana, aborígenes australianos, filipinos e islas del Pacífico se asocia con el paso definitivo a la edad adulta y la eliminación del lado femenino, de forma que permite asumir al hombre nuevos roles y obligaciones.

CONCLUSIÓN

La circuncisión es una práctica ampliamente extendida, realizada fuera de criterios estrictamente médicos  que debería ser tenida en cuenta a la hora de evaluar de forma íntegra la salud del individuo, evitando puntos de vista etnocéntricos.